Que una familia, repita una y otra vez de hacer fotografías contigo es algo muy gratificante a la vez de emocionante. Poder ver como crece una familia, lo fuerte que se crean los enlaces entre cada miembro de la familia y lo rápido que crecen los niños!
En este caso, la primera vez que fotografié a Aza, Luna aún no había nacido y estaba en la barriguita de su mamá.

Luego tuve luego la suerte de conocerla a las pocas semanas de nacer.

Y nos volvimos a encontrsar con 6 meses.

Y ahora, despúes de dos añitos, pude ver la niña tan bonita en quien se ha convertido y lo feliz que está con sus padres!
Os dejo aquí debajo un pequeño resumen de esta sesión tan divertida y tan bonita con Luna, Aza y Rosqui.
Comentários